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tareas.
Mi recompensa
no es más una cajetilla de cigarros, ni mucho menos unas latas de cerveza. Mi recompensa
es caminar orgullosa por la calle dándome cuenta que todo se quedo atrás ,que
lo malo paso y paso y el tiempo se lo llevo como una pluma ligera. Me encanta
estar frente al mar y sentir su brisa sin que me moleste despeinarme y sentirme
melosa.
Me encanta
saber que estoy trabajando por un futuro y que probablemente todo mejore siempre,
tendré mis caídas pero sé que valdrá la pena. Qué bueno es llegar a casa de un día
tan largo y encontrar a mamá y a papá viendo la tv disfrutando su vejez. Qué
bueno es tener aun a mi abuela aunque no me hable y aunque no me reconozca pues
el Alzheimer se le llevo los recuerdos pero qué bueno que este aquí.
Qué bueno
es tener el cabello corto y no preocuparse por las etiquetas que puedan ponerte
los demás. Qué bueno es comer sano y estar sano, sin nada que me intoxique el
alma y mucho menos la piel. Tomo un gran sorbo de mi agua y la siento
refrescando mi garganta y haciéndome sentir plena y aliviada. Abro y cierro mis
ojos pero no es de cansancio, solo son las ganas de querer sentir un poquito más
de lo normal.
Creo que
pasa el tiempo y me voy dando cuenta que la recompensa no es el dinero, ni la ropa,
ni las fiestas, ni las cosas materiales que puedas tener a tu alrededor. Y si
son cosas que a veces uno puede tener pero no es importante para mí. Creo que
la recompensa que uno puede tener es el amor.
La semana
pasada tuve la más hermosa recompensa, la mirada mas sincera. La semana pasada
tuve todos los días un beso y abrazo de buenas noches. Tuve amor y consquillas,
tuve engreimiento y momentos de seriedad. La semana pasada mi recompensa fue
tomar su mano cada noche y decirle:”Esta es mi recompensa al final del día” y
besarlo. Me gustaría poder tomar tu mano todas las noches, besarte y que me
abraces juntando lo mejor de mí. Quiero crecer contigo y que estemos orgullosos
de lo que somos. Me gustas como recompensa en esta vida tan llena de caos, tú
eres lo único bello que puedo ver.
Te espero
con ansiaste espero siempre para tomar tu mano y decírtelo siempre. Nuestra recompensa
no son los chocolates que te doy o la comida que te cocino, no son los carteles
ni las cartas, ni mucho menos las pulseras que llevamos o llevavamos, nuestra
recompensa es tenernos el uno al otro. Nuestra recompensa es nuestro amor.
Espero
nunca me faltes, espero nunca se acabe, espero siempre estemos juntos. Espero
siempre poder abrazarte y besar tu frente cada noche. Quiero siempre esperarte
y que me recibas como solo tú sabes, con tus gestos y con tus besos. Quiero que
me quieras y que siempre me ayudes a ser la mejor. Te amo y lo siento si a
veces no soy tan mujer pero es que a veces mis palabras no salen cuando me
miras de esa manera.
Quiero que
mi recompensa sea siempre despertar y verte conmigo. Quiero que mi recompensa
sea amanecer siempre con el corazón contento. Quiero que mi recompensa sea siempre
estar contigo. Quiero que seas tú siempre tú conmigo. Mi recompensa es tenerte,
quererte y mantenerte siempre caliente cuando el frio nos sabotee. Mi
recompensa es tomarte de la mano y amarte. Mi recompensa no es la pulsera que
se perdió pues ahí no se pierde mi amor, mí recompensa es compartir nuestras
vida. Tú nunca olvides cual es nuestra recompensa. Te amo.