lunes, 27 de julio de 2015

Smoke

Manzanilla/cigarros y el viaje de una mente.


Una mente que nunca descansa, una mente que no florece, una mente tan ausente como mi MENTE.
El frió no me debilita ni me atormenta sin embargo suenan los relámpagos chocando contra mi habitación, el silencio a inundado toda una casa y se ha depositado en las paredes haciéndolas sentir más suyas que mías. Desearía correr y correr y no sentirme atrapada por ninguna fuerza más que por la del humo de un cigarro que abraza mi vida.

Un sorbo gigante de manzanilla se deposita sobre mí  y por un momento me imagino que el alma me dejó de doler, luego prendo un cigarro y me doy cuenta que el dolor no pasa, porque si y porque seamos coherentes, las almas heridas jamás calman. Solo hacemos un punto aparte y seguimos adelante mientras pateamos piedras o al menos eso hago yo cuando estoy sola caminando.

Mi ambiente huele a tabaco, solitario tabaco que se pasea por mis dedos desde hace años, me tiene viviendo en el tormento, me tiene viviendo en el incomodo ambiente de la ex borderline. .A veces cuando me veo al espejo no se en quien me convierto, ni mucho menos que soy, siempre estoy saltando de personajes como una sinvergüenza pero sé que siempre seré una solitaria en potencia.

Joss y su increíble soledad con su manzanilla y la aventura de un cigarro que nunca acaba. Por momentos me pregunto si la vida nos está cogiendo el culo y tirándonos de patadas. Por momentos me imagino que la vida me está cogiendo el culo las 24 horas del día, no me jodas vida, lo digo porque siempre siento que algo hago mal aunque tal vez esté bien o aunque tal vez lo mejor que hago es meterme a la cama, taparme hasta la cara y cantar hasta dormir.

¿Sera cierto eso de que todos pasamos por esta etapa? ¿Será que yo no me estoy ahogando desde hace 5 años? Entonces miro entre la oscuridad y busco pequeños destellos de luces que alumbren esta oscuridad, me froto las manos y el único destello visible es el del encendedor. Entonces solo me refugio en los mil inviernos que hay dentro de mí y abrazo mis piernas contra mi cuerpo para sentirme más acompañada.

A veces la gente debería de rebuscar detrás de estos ojos, a veces deberían de mirar más allá de una sonrisa y ver las marcas de las guerras perdidas.

 Solo a veces quisiera no despertar con estos ojos tristes de roedor apunto d ser atrapado por un gato. A veces desearía recorrer mi piel y amarla tal y como es aunque duela amarse así mismo. Aunque duela ser siempre la que se fuma todos los cigarros, aunque duela ser siempre Joss.